Bernabé Ferreyra (Rufino, Argentina, 12 de febrero de 1909 — 22 de mayo de 1972) fue un futbolista argentino.
Fue uno de los más destacados goleadores del fútbol mundial en los años 30 y uno de los grandes en la historia del fútbol argentino, a lo largo de su carrera deportiva fue apodado El Mortero de Rufino por la gran potencia de sus pelotazos que lograban alcanzar una velocidad de 200 km/h y La Fiera por su espíritu de lucha. Es un orgullo de todos los hinchas de Tigre, uno de los máximos ídolos de River Plate. Un crack desde las filas tigrenses que al fútbol fue, en las décadas de los 20 y 30, lo que Diego Armando Maradona en los años 80 y 90.
Fue en el Club Atlético Tigre donde Ferreyra se lanzó a la fama a base de una enormidad de goles; luego fue la primera gran estrella que tuvo el club River Plate, y uno de los primeros jugadores de la era profesional del fútbol argentino en alcanzar gran popularidad. Actuó en cuatro películas, fue mencionado en tangos y en su ciudad natal hay un club deportivo y una calle que llevan su nombre.
Según la IFFHS convirtió 232 goles en 228 partidos en torneos de Primera División, alcanzando un promedio de 1.01 gol por partido, al igual que Valeriano López y Arthur Friedenreich, los únicos tres futbolistas de Latinoamérica que convirtieron más tantos que encuentros disputados.
Bernabé Ferreyra jugaba como centrodelantero, ya que por entonces las camisetas no llevaban números y se distinguía a los jugadores por su ubicación. El futbolista argentino no sólo tenía potencia en su tiro sino que también se destacó por su inteligencia a la hora de repartir el juego y por gambetear con rapidez. La crónica de la época hace constar que la mayoría de sus goles era el resultado, más que de la fabulosa fuerza de su remate, de su velocidad mental y su acción resuelta para liquidar una situación con el pelotazo inesperado y sin vacilaciones.