Alfonso Froilaz, llamado «el Jorobado» (-c. 932), fue rey de León de 925 a 926. Reinó durante un breve período de tiempo, desde la muerte de su padre Fruela II, probablemente en agosto de 925, hasta que los hijos de Ordoño II le expulsaron del trono a comienzos del año 926. En el año 932, Ramiro II de León ordenó apresar y cegar a todos los miembros de su familia que se oponían a él: Alfonso Froilaz y sus hermanos Ordoño y Ramiro —primos de Ramiro II— y Alfonso Ordóñez —hermano de Ramiro II y el que fuera Alfonso IV de León—.
La vida y el reinado de Alfonso Froilaz está poco documentada. Muchas crónicas medievales ignoran su gobierno y otras le confunden con su primo y sucesor del mismo nombre, Alfonso IV, quien también tuvo una vida y un reinado accidentados. Aunque su nombre aparece junto al resto de reyes en la Nomina Regum Catolicorum Legionensum, es significativo el hecho de que haya pasado a la historia sin su correspondiente ordinal.