Se hicieron astillas, mi amor y mis sueños...
Qué vale ser bueno... qué vale creer...
Soñar que la vida es un mundo risueño...
Sentirme tu dueño... y luego caer...
Astilla...
Astilla es la pena
que llevo clavada
como puñalada
que mata la fe...
Creía en la vida... amaba las cosas...
Regaba mi huerto con agua de fe...
Y un día... llegaste a mí tan hermosa...
que toda la gloria del mundo soñé...
y el mundo reía... y tú te reías...
Y yo, pobre iluso... reía también...
Y ahora que todos mis sueños han muerto...
Pregunto si es cierto... si un día te amé...
Astilla es la pena de amor sin consuelo...
Palabras mentidas golpeando mi sien...
Astilla es tu falsa sonrisa de hielo...
Tu boca pintada, que tanto besé...
Astilla...
Astilla es la pena
que llevo clavada,
como puñalada
que mata la fe...