¡Si supieras cómo estoy sin tu querer!
Si supieras que no puedo todavía
resignarme a comprender que no sos mía,
ni arrancarme los recuerdos del ayer.
Si supieras de mi enorme padecer,
de mi angustia, de mi desesperación,
¡si vos supieras que en mi vida
tu cariño es una herida que me parte el corazón!
Aunque sea mentira
decime... ¡Te quiero!...
Que con esa mentira
yo sigo viviendo.
Que con esa mentira
que vos me decís
me haces tan feliz...
entre toda mi pena.
Seguiré por la vida
llevando en el alma,
las dulces palabras
¡que vos me mentís!...
Yo no sé si vos ahora me querés,
si yo vivo en tu recuerdo todavía,
si pensaste que podemos algún día
encontrarnos y querernos otra vez...
Yo no sé si vos ahora me tenés
nada más que una piadosa compasión...
Si nunca más con mi destino
cruzaré por tu camino y entraré en tu corazón...