Che Victoria, te pido perdón
si todavía el “escore” no abrí,
hice “fau”, y aunque no hubo intención
si querés me pateás el “friquic”.
Pero juro que hablé con tu viejo,
que de entrada nomás me marcó,
¡y es un Bossio! De cerca y de lejos
siempre al corner mis tiros sacó.
¿De qué sirve gastarse en gambetas
si tu viejo es como una pared?
¡Qué Corazzo querida pebeta!
¡No lo burla ni Don Bernabé!
Cuantas veces en rápido “rush”
como Cherro me quise filtrar,
y él, canchero y veloz como luz
se adelanta y me deja en “ofsai”.
¡Che Vicotria, no sé ya qué hacer,
si hasta con Lauri y con viento a favor
estoy viendo que voy a perder
este espléndido lance de amor!
Pero yo te aseguro —aunque es feo—
que hasta voy a forzar un penal...
Yo pa’ casa me llevo el trofeo
aunque silben los de la oficial...
He jurado que en esta porfía
me impondré como cuadra a un campeón
y tu mano al final “Serrá mía”
que no en vano me llaman “Ciclón”.
Yo de Massa no envidio el tapón...
Ni el bordao primoroso ‘e Pichín
hoy me corto al estilo Naón,
¡y esta noche conquisto el Fortín!...