(Hablado)
Hay una araña en mi anochecida...
tejiéndome el desgano con su tul;
hoy no quiero asomarme a ver la vida
ni ese cielo infinitamente azul...
(Refrán)
Cerrame las ventanas a la noche,
a ese olor que me llega desde afuera
y es como el escozor de algún reproche,
y es eso que otros llaman... ¡primavera!...
Cerrame las ventanas a la noche
al rumor, al bullicio de la gente,
a los ojos que me miran desde un coche
¡a los ojos que me guiñan insolentes!
Cerrame las ventanas bien cerradas
a la esperanza absurda y al desvelo;
no ves que hay mil palomas asustadas
volando en el turbión de un negro cielo;
por Dios, amor, cerrame las ventanas
a ese olor que me llega desde afuera
porque estoy triste y hoy no tengo ganas,
de ver cómo llegó la primavera...
tal vez el ansia vuelva a mí mañana
¡pero por hoy, amor, cerrame las ventanas!...