Con las pocas palabras
que nos dio el silencio
con los ojos intensos
que nos dio la simpleza
compartiendo el secreto
de tu noche y mis versos,
inventamos un mundo
sin vendernos los besos.
Solitarios amantes
pasajeros del tiempo
habitamos mil tardes
el rincón del misterio
recorrimos sin rumbo
las baldosas sin sueño
nos creíamos dueños
de la tierra y del sol.
(Hablado)
Pero un algo sin nombre,
nos robó del hechizo
y nos fuimos perdiendo
de la mano del viento
por extraños paisajes
que crecían por dentro.
Alejándonos solos
como dos hojas libres
olvidando las horas
olvidando los días.
Con las pocas palabras
que han quedado conmigo,
voy mintiendo al olvido
por las calles de hoy
inventando poemas
de silencio y de vino
apretando indefenso
toda mi soledad.
Con las pocas palabras
que nos daba el misterio
voy abriendo la noche
que tu noche dejó
caminando tu nombre
por baldosas sin sueño
recorriendo aquel mundo
que inventamos los dos.
(Coda)
Solitarios amantes
pasajeros del tiempo...