Bien lo sé… es dura la pendiente,
no dejés que la vida te arrincone,
aflojaste en el codo de los veinte
donde tallan las más caras ilusiones.
Crecer… crecer y darlo todo,
no encontrar las respuestas a tus dudas
ni una puerta abierta con los codos
o con las manos sobre el corazón.
Volvé a vivir con tus sueños,
dale a la vida un revés…
ponele fe al porvenir,
¡podrás por dentro crecer…!
Al que te dé una mano
vos extendele las dos…
comenzarás a reír…
¡vamos…! Viví con Dios.
Bien lo sé… amargo es el camino
cuando el mazo se dio mal barajado,
no apostés un solo céntimo al destino
cuando el otro sin querer hoy te ha fallado.
Crecer… crecer y darlo todo,
esperar que una puerta se entreabra…
no bajar la cabeza frente al lodo,
saltar el barro… sin caer en él.