Barrio de hacha y tiza, papuso, canyengue,
ande tuvo cuna la nueva emoción,
ande el alma rea sigue usando lengue
y el tango se tuerce como un bandoneón.
Barrio pinturero y cancha'e poetas,
ande los muchachos son como una flor,
ande se arremangan las lindas pebetas
que tienen los ojos en curda de amor.
Boedo, Boedo,
la calle de todos,
la alegre Florida
del triste arrabal,
decile muy quedo,
decile a la piba
romántica y papa
que ya va a llegar.
Batile que espere soñando y alerta,
que sólo es un tango la loca ilusión,
que pronto el garabo se irá hasta la puerta
torciendo su pinta como un bandoneón.
Y entonces, Boedo papuso, canyengue,
al ritmo rasposo de un dulce gotán,
verá a una pebeta que agita su lengue
cuando se despide de su gavilán.