Hoy poné sobre la mesa la esperanza que te queda,
olvidate del fracaso que te impide caminar,
enfrentate a la locura de este tiempo lindo y bravo,
sacudite las tristezas que ya es hora de empezar.
Presentate ante el destino con tu pinta florecida,
ya no hay tiempo para llantos, no hay lugar para el adiós.
Si otra vez está tu vuelo de gorrión iluminado
y en la calle como siempre su candombe canta el sol.
Acercate a la barriada que otra vez amasa sueños,
si esta vez hay sangre joven con la que podés volar.
Vos nacés, sin darte cuenta, arrimado al desencuentro,
pero ahora en este tiempo nos podemos encontrar.
Inventemos nuevas metas para andar todos los días,
vos y yo, paso por paso, trataremos de ganar.
Ataquemos a las nubes con un láser de guitarras
que armaremos flor de lío, despertando a la ciudad.
Hoy ponete un traje nuevo trajinado de gorriones
sacale brillo a las alas que te lleven a volar,
que te arrimen al incendio que se vuelca desde un beso,
revirate de utopías que ya es hora de cambiar.
Vos trepate a tu destino con el alma florecida
que una mina y un varón siguen los pasos de un pichón
que ahora teje un tiempo nuevo con las líneas de su mano
y en sus ojos más que nunca su milagro nos da el sol.