Google // Facebook

La de los ojos tristes

Letra: Héctor Marcó

Música: Edgardo Donato

Un bandoneón grita ¡alerta!
muchachos, la orquesta
nos dice: a bailar...
Mi pecho es la clave
de un son que no existe...
Me nombran, quién sabe
Muguét o Ninón...
O es mi pobre Elvira
«la de los ojos tristes»
que hoy desde el cielo
bajó a mi corazón...
No me despierten si sueño;
muchachos, bailemos
¡que un tango es amor!

Caravana...
de arlequines
somos todos
en la vida...
que enredados a un amor que nos domina
en un tango nos queremos redimir...
Noches quietas;
luna clara...
labios rojos
¡que quemaban!
Ella trajo a mi cariño y yo soñaba,
¡pero un día la sentí morir!

Ya el bandoneón calla y pienso...
muchachos, silencio,
que quiero evocar...
Hay llanto en mi alma
mi amor ya no existe...
me olvidan... ¡qué importa!
Muguét o Ninón...
Si hoy mi pobre Elvira
«la de los ojos tristes»
con su recuerdo
me inflama el corazón...
No me despierten si sueño...
muchachos, bailemos,
¡que un tango es amor!