De toda tu ruina, tu barro y miseria,
con besos y sueños te quise arrancar.
Y así, poco a poco, curé tus heridas
y llené tu vida de amor y bondad.
Pero sin embargo un día arrojaste
brutal por el fango el sol de mi amor.
Hoy vuelves, de nuevo, ahora que es tarde,
ahora que tengo sin fe el corazón.
Lo siento en el alma,
no puedo besarte,
no puedo quererte
ni darte un perdón.
Lo siento en el alma,
andate y no vuelvas,
lo nuestro fue un sueño
que ya terminó.
Lo siento en el alma,
tu engaño y mi orgullo
cerraron la puerta de
mi corazón.
Ahogarte en mis brazos hubiese querido,
abrirte las venas, matarte y morir.
Cegado de rabia buscaba encontrarte
para desahogarme de tanto sufrir.
Después yo me dije, no vale la pena,
hundirme y perderme total... ¿para qué?
Ahora regresas golpeando a mi puerta,
ahora que es tarde, muy tarde ya ves.