Misteriosa y vana mujer
que en mi camino se cruzó
¿con qué secreto poder,
a su vida me encadenó?
¿Qué consigo con armar mi mano
si el amor a la fuerza, es en vano?
¡Oh, carnaval! Tu risa recordó
el dulce beso que me traicionó.
Ya "Don Momo" llegó
con su alegría y desenfreno.
Cierta vez que pasó
dejó en mi alma su veneno.
Aquel beso sensual
que todavía me estremece,
fue causa de mi mal.
¡Despiadado sino fatal!
La Argentina: Mazurka de Ketterer en Pianola por Horacio Asborno desde "La Argentina"