De la novela gris de mi vivir
las páginas de amor
oigo crujir;
y hay un repiqueteo
de recordación
que sabe resistir
mi corazón.
Horas de placidez
puedo leer,
romanticismo azul
de aquel querer...
fragancia de rosal
en floración...
¡Burbujas de ilusión!
¿Dónde estarás, mujer
de aquel querer?...
¡Yo te veo
en un sendero...
pisando estás
la rosa de un "te quiero"
que no escucharas!
Pero que alguna vez
lo sentirás...
me abruma el sinsabor
del desamor
y quisiera destrozar
(¡que ganas de llorar!)
las páginas muertas
que me dan
la horrible sensación
¡de uñas en mi corazón!
¡Qué triste nuestro adiós!
¿Te acordarás?...
¡Tus labios
suspiraron un jamás!
Si ese jamás tan triste
golpeara en tu sien,
sería un reproche azul...
¡tú sabes bien!
Si toda ausencia
es para olvidar,
y es una senda
fácil de encontrar.
Las horas del amor
y la ilusión,
¡páginas muertas son!