Cuántas, cuántas citas deshojé,
junto a la ventana de tu ayer.
Si aquellos años tan felices
regresaran a mi vida,
serías mía.
Pena, copa y tango es mi canción,
pena de saber que te perdí.
Canción de tango en la distancia.
Sorbo amargo del amor...
mi soledad.
Vana pretensión la de olvidarte
si mi afán por recordarte,
encurdeló mi corazón.
Poema en gris,
tu risa y tu candor,
mi verso y tu emoción,
dos temas y un final.
¡Sanción inapelable!
¡Destino inexorable!
... Acción del yerro y del fracaso.
Ebrio el bandoneón en su agonía
me recuerda que tu nombre
fue motivo en mi vivir.
Ya nunca más,
escucharé tu voz
tu voz de tango triste,
que me abandonó.
Burda pantomima del alcohol,
embriagado y terco en su cristal.
Interrogante en el camino
pausa breve, letra roja,
de mi destino.
Suerte del que juega hasta perder.
Contra de la vida tan brutal.
Derrota cierta de las ansias,
punto muerto del dolor...
mi corazón.