Mi canción...
Mi canción tiene sabor de adiós,
como el río que se la llevó,
robándome su amor sin porqué.
Mira... la risa cristalina
de los niños se apagó.
Y, en silencio,
buscando van una razón.
Dime por qué te fuiste de mi ribera.
Llevo en mis labios tus besos.
Tengo ternura de tiempo,
aquí en mi corazón.
Dime por qué te fuiste de mi ribera.
Dónde habrá anclado tu olvido,
mientras lloro por tu ausencia
algún barco que se aleja,
hoy estrena amores nuevos.
Mira... la luna recorrida
por mil títeres de hollín,
ya no brilla,
la misma pena la cubrió.