Cantor, porque nací cantor.
Porque guardé el aire de mi gente y su dolor.
Cantor, porque crecí al fulgor
de un patio desvelado por el sol.
Cantor, porque me gusta ser
un pájaro que invita a amanecer.
Cantor, me hice cantor,
porque cantando se me puede ver en pie.
Después una guitarra en la penumbra,
un hombre empecinado que se alumbra.
Después una ternura y el adiós,
la soledad del pibe aquel,
esa muchacha que esperó.
Después, fui la poesía que voló,
jilgueros del suburbio viajaron en mi voz,
Después fui como pueden ver cantor
y toda la ciudad me acompañó.
Cantor porque subí al amor
porque dejé mensajes de la luna en su balcón.
Cantor porque yo vi el temblor
de un tango que en la noche se perdió.
Cantor, yo soy el canto de hoy,
un sueño que resiste igual que yo.
Cantor, me hice cantor
porque cantando me refresco el corazón.