Tengo un amigo que está metido
con una mina que está muy buena.
Los labios rojos, tremendos ojos,
cuerpo con curvas que te marean.
Mi amigo es calvo, medio petiso
y tiene un cuore que da pelea.
Es generoso, considerado,
medio gordito y tartamudea.
Mi amigo sufre porque la mina
dice que no sabe lo que quiere.
Que él es tan lindo, que él es distinto,
que si le falta ella se muere.
Pero a la mina lo da el ataque
cuando las dudas se le aparecen
le da la depre, le monta un drama,
le dice que ella no lo merece.
Mi amigo se atormenta, se echa la culpa él,
pero otra vez lo intenta, no la quiere perder.
El tipo va de frrnte y alimenta su fe
como un loco suicida, él no tiene plan b,
como un equilibrista que camina sin red.
Yo que he vivido alguna historia
muy parecida a la de mi amigo
sé que esos cuantos son la materia
de algunos tangos y algún olvido.
Entre botellas me cuenta de ella
y escucho todo lo que me dice
yo torno nota y espero el día
que nos mostremos las cicatrices.