Che, Sinfronio, quién diría... Qué repunte que has pegado...
Hace un año andabas loco, de hospital en hospital...
Te fallaba la “Despensa” porque estabas empachado;
Te mandaste en un banquete un lechón y un pavo real...
Hoy estás hecho una papa... Sos el Dandy preferido;
¡y hay cien viejas millonarias que suspiran por tu amor!
Donde talla tu figura se acabaron los maridos...
y los novios quedan chatos ¡y hasta pierden el color!
¡Sinfronio!
Por tu estado vigoroso
sos el rante más buen mozo
que se puede palpitar...
Y, al mirarte,
la más bella queda absorta;
y hasta el tráfico se corta
para dejarte pasar...
¡Sinfronio!
Por tu aire bacanejo
le has tirado el chico lejos
a “Mauricio Chevalier”...
Y, sin grupo,
se la diste con tocino
a “Rodolfo Valentino”
y hasta al mismo “John Gilbert”.
Vos decís que la victoria de tu cuerpo tan lozano
la debés a las regatas, al boxeo y natación.
Que el sport te ha convertido de enfermizo en hombre sano,
¡pero a mí con esa mula no me engrupe ni Sansón!...
Deschavate sobre el pucho y no metas esa historia
que al sport le debe todo tu florida juventud...
El secreto está, sin grupo, n’el marroco de Tanoira,
que fue escoba en tu intestino ¡y te salvó la salud!