Parado en esta esquina de mi vida,
echando una mirada atrás,
encuentro tu alegría y tu sonrisa
que supo mi esperanza iluminar.
Mis días trascurrían sin destino,
mis ganas no tenían porvenir
después que te miré, me quise despertar
la noche fue quedando atrás.
Y comenzamos nuestra historia que nació
tomándonos las manos dulcemente
y comprendí mirando al cielo
que Dios estaba con nosotros, vida
juntos corrimos a su lado sin saber
que poco duraría nuestro amor
quedo un adiós y una pregunta
¿Por qué si nos quisimos lo nuestro terminó?
Ahora en otra esquina de mi vida
comprendo cuanto tuve que pasar
para decir tu nombre y recordarte
y no sentir más ganas de llorar.
No sé qué me deparara el destino
quizás mi vida siga en soledad
mas sé que con amor mis días seguirán,
quedando aquella noche siempre atrás.