Mujer que viste de seda,
que vive en el cabaret,
que pasa toda su vida
engañando a los hombres
y engañándose.
No tiene padre ni hermano
y no sabe que es querer,
ha sido desde chiquita,
y quién sabe hasta cuándo,
mujer de alquiler...
Tu boca roja pintada,
la melena oxigenada,
escondés un dolor
al ofrecer todo tu amor...
Y una noche de su vida,
de shimmy y tango rendida,
solita se murió,
como una flor, que nadie amó.
Mujer que viste de seda,
que vive en el cabaret,
que pasa toda su vida
engañando a los hombres
y engañándose.
Pobre almita ilusionada,
ni la seda ni el champán
pudieron borrar tu pena
y acabaste tus días
bailando un gotán.