Cuando allá en el arrabal
ibas paica de chancletas
y te hacías la coqueta
con un mugre delantal.
Fui tu amor sentimental,
fui tu cariño profundo,
y para vos en el mundo
como yo no había otro igual.
¡Cuando paica de chancletas,
ibas por el arrabal!...
Ahora es otra tu ilusión,
tus ideales ya cambiaron.
¡Tu corazón me robaron
ya no soy tu corazón!...
Te espiantastes, porque creíste
que la bohemia en que vivías,
era pobre su alegría
y que el mundo era mayor...
sin pensar que te quería
y cuan grande era mi amor.
Fue una tarde que esperaba
que salieras del laburo,
y batirte que te amaba
más que nunca en mi pasión.
Te esperé... mas no viniste,
me dijeron de tu huida
con un viejo a quien seguiste
por el vento que ofreció,
en un mundo de mentiras
que a mi ayer desvaneció.
Ya sin virtud ni amor...
te sentiste hoy mujer,
porque ya fuiste arrojada
donde no tendrás vejez.
Esas sedas que vestís
al final has de llorar,
¡son esos brillos fugaces
pedazos de tu honradez!...