Un mazo de sombras barajo la noche,
un fueye rezonga un tango tristón,
diquera y coqueta se asoma la luna
a dar su paseo por el callejón...
Se escucha a lo lejos la ronda de un "chafe"
copando la esquina un curda cruzó,
mientras anda un perro buscando la huella
del hueso enterrado la noche anterior.
Bostezando su miseria,
el suburbio se ha dormido
rumbo al centro dolorido
el último bondi va...
Cruzo un purrete diariero,
tibias chirolas contando,
tal vez sus cuentas echando
si dan para pucheriar.
Un largo silbido y en ancas un paso,
resuelto y seguro derecho a un portal.
Y allí entre las sombras dos bocas se juntan
en una promesa de espera formal...
Se agranda el silencio, se apagan los ruidos,
en todos las cosas el sueño es señor,
solamente quedan la luna en el cielo
y en la quieta esquina, su novio, el botón.