Desde que te fuiste
del cotorro ando tan triste, si supieras
que no tengo para nada voluntad
todo lo veo empañado
de tanto como he llorado.
Ya no hay en mi pecho
para el daño que me has hecho, te lo juro
ni un chiquito de rencor... ten caridad.
Cada vez te quiero más
y yo sin tus caricias
de vivir no soy capaz.
Volvé, mirá, volvé
engáñame nomás
no te molestaré
con celos jamás.
Vos serás como vos quieras
para todas las mujeres
y yo no pensaré
si me engañás o no
pero a mi lao volvé,
volvéme a mentir
o me matarás
que de vivir
sin vos no soy capaz.
No hay un desalmado
que merezca ser odiado y olvidado
como vos merecerías... bien lo sé...
Pero yo no sabré odiarte
porque nací para amarte.
Sé que soy cobarde
mas no puedo ni deseo hacer alarde
de un orgullo que no siento... y para qué.
Sé que ya no me querés
que ya vivís con otra...
pero así y todo volvé.