Te quiero...
ya sabes que te quiero.
Mis besos, te dicen la verdad,
en la fe de tu amor encontré
la razón de sentirme feliz
y el inmenso placer de decir,
sin cesar, con pasión, ¡Sí!
Te quiero...
desesperadamente.
Unidos, vivamos este amor,
y dejemos que el suave latir
que escuchamos en el corazón
nos repita cual dulce canción
¡Te quiero!...