Ya fue una vez
y es otra vez…
La misma pena,
la misma sed…
pero qué raro mimetismo el del amor
que una vez más cambia color.
Una vez más
y otra vez más.
La misma pena
y tú no estás.
Si era un país de almendro en flor,
el beso en el cancel, muriéndose de amor.
Era
tu tiemblo de gacela un son.
Era
tu boca de canela y ron.
Eras tú,
que era decir amor.
Eras tú, que es corazón.
Era luz, era flor, eras tú, era amor…
¡Ay! ¡Y hoy es dolor!
Siempre llorar.
Siempre llorar
la misma pena,
el mismo mal.
Cuando el silencio es impostado, es más atroz.
Mi soledad no cree en Dios.
Una vez más,
y otra vez más.
La misma pena
y tú no estás.
Ni está el país de almendro en flor,
ni el beso en el cancel, muriéndose de amor.