Acercate a mi
y oirás mi corazón
contento latir
como un brujo reloj.
La noche es azul,
convida a soñar,
ya el cielo ha encendido
su faro mejor.
Si un beso te doy,
pecado no ha de ser;
culpable es la noche
que incita a querer.
Me tienta el amor,
acércate ya,
que el credo de un sueño
nos revivirá.
Corre, corre barcarola,
por mi río de ilusión.
Que en el canto de las olas
surgirá mi confesión.
Soy una ...